¿Cuatro años invernando?

Hoy, a cuatro días de la eliminación del mundial de nuestro seleccionado, intento planear mi futuro como asérrimo espectador de fútbol. No quiero ponerme a ver los motivos de la eliminación, afirmar que Riquelme fracasó, que Messi debió entrar, etc. (bueno, ya lo dije). Simplemente manifiesto a través de éste, mi propio blog de expresión, la eterna e inmensa angustia que me provoca esta eliminación a manos de un mediocre equipo como resultó ser el germano.
¿Que vamos a hacer para mitigar el vacío que experimentamos por este fracaso? Aquí van algunas propuestas y mi opinión sobre su aplicabilidad:
1- Llenarlo con el orgullo de que el equipo dejó todo para ganar. No me alcanza. Dejar todo no es mérito sino obligación, nadie se acuerda de los que dejan todo y nunca ganan, o tal vez sí se acuerden y digan: esos fracasados nunca ganan nada pero le ponen actitud. Opción descartada.
2- Compararlo con el mundial 2002 y estar contentos con el progreso. Comparado con esa vergonzosa actuación todo es bueno. El 2006 fue un fracaso menor, pero fracaso al fin. Obviamente, comparado con la nada, esto es algo, pero la tristeza y la ansiedad de que llegue el 2010 no se disipan. Descartado
3- Esperar que se juegue la "Copa América" y la ganemos. La verdad que la Copa América viene cada vez más decadente, aunque ganarla no estaría mal. De todas formas no es ni el 2 % del mundial. Descartado.
4- Agradecer que no somos uruguayos ni chilenos. No es mala opción, eso sí que debe ser triste. Es una opción que nos puede dar una satisfacción momentánea y a la que podemos echar mano cada vez que nos deprimamos. En realidad yo ya agradecía no serlo aunque saliéramos campeones, por lo tanto no puedo aplicar esta solución.
5- Alentar con todo al seleccionado de Básquet en el mundial que se aproxima. Definitivamente descartada. No tengo nada contra ese deporte, pero no despierta pasión en mí. Bueno, si salimos campeones, como en las olimpíadas me va a poner contento, pero...
6- Invernar cuatro años hasta que llegue el mundial de Sudáfrica. La verdad, no estaría mal, entrar en un estado de letargo permanente, de pura inconciencia. El mundo transcurriría con total normalidad y yo simplemente a la espera del momento oportuno para despertar. Que bueno sería si además tuviera sueños mágicos en los que damos la vuelta olímpica y salimos todos a festejar... Eso sí, que me prometan que cuando llegue el día del inicio del mundial vamos a estar clasificados, no sea cosa que en mi ausencia ocurrieron catástrofes futbolísticas y no estamos en el evento.
Pensándolo bien, mejor me quedo acá a vigilar que eso no suceda. Mientras tanto, voy a tratar de consolarme con las primeras cinco opciones en conjunto y quien dice que no logre salir de la tentación de cortarme las venas con una cuchara. ¿Uds. ya pensaron en algo?
Éxitos